Definir las polaridades y la dualidad es sencillo, comprenderla e interactuar con ellas de forma correcta es una Maestría que requiere presencia, practica, apertura, conciencia, devoción y amor por todo lo que es.
En la danza cósmica de la polaridad que busca el encuentro con lo divino, nos encontramos al eterno femenino de Dios, Devi kundalini Shakti, y la eterna conciencia de dios, Shiva.
Estas manifestaciones esenciales, y todas su variantes en concepto y forma, (Parvati, Durga, Uma y Kali) para la energía Shakti, por ser aspectos de la energía femenina, variable, mutable, indefinible, y sin forma, hacen necesaria la aparición del a conciencia masculina Shiva de manera presencial y direccionable, provista de propósito y empuje.
Es la Shakti la que inspira, nutre, acoge e inspira a Shiva, para que este desde su conciencia de Dios Padre pueda canalizar toda la energía de la Diosa madre, para la creación del mundo...
Así Brhama y Sarasvati, Dios padre y Diosa madre de toda la creación, delegan en sus representaciones humanas, Shiva-Shakti el poder manifiesto para la co-creación del cielo en la tierra.
Utilizar este poder de la manera adecuada, requiere una apertura de corazón y devoción sin limites, así como la entrega, la rendición, la aceptación de las circunstancias de nuestro proceso conciencial y de los acontecimientos que vivimos, para desde ahí, generar el cambio, polarizados en nuestras dos energías internas...La de la creatividad y la conciencia, la femenina y la masculina...la de los dos danzantes sin fin, presentes en todo el universo manifestado...
En la danza cósmica de la polaridad que busca el encuentro con lo divino, nos encontramos al eterno femenino de Dios, Devi kundalini Shakti, y la eterna conciencia de dios, Shiva.
Estas manifestaciones esenciales, y todas su variantes en concepto y forma, (Parvati, Durga, Uma y Kali) para la energía Shakti, por ser aspectos de la energía femenina, variable, mutable, indefinible, y sin forma, hacen necesaria la aparición del a conciencia masculina Shiva de manera presencial y direccionable, provista de propósito y empuje.
Es la Shakti la que inspira, nutre, acoge e inspira a Shiva, para que este desde su conciencia de Dios Padre pueda canalizar toda la energía de la Diosa madre, para la creación del mundo...
Así Brhama y Sarasvati, Dios padre y Diosa madre de toda la creación, delegan en sus representaciones humanas, Shiva-Shakti el poder manifiesto para la co-creación del cielo en la tierra.
Utilizar este poder de la manera adecuada, requiere una apertura de corazón y devoción sin limites, así como la entrega, la rendición, la aceptación de las circunstancias de nuestro proceso conciencial y de los acontecimientos que vivimos, para desde ahí, generar el cambio, polarizados en nuestras dos energías internas...La de la creatividad y la conciencia, la femenina y la masculina...la de los dos danzantes sin fin, presentes en todo el universo manifestado...
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