Las pruebas del laberinto...........

Absolutamente todo lo que nos acontece tiene que ver con algún aspecto de nosotros, y de nuestra psiché, la cual no deja de someternos a las constantes pruebas del laberinto para nuestro propio aprendizaje y desarrollo.
Podemos no verlas, ignorarlas, no afrontarlas e incluso trasladar la responsabilidad de las mismas a terceros, aunque eso lejos de solventar la situación generará mayor sufrimiento y la inevitable repetición, en mutada y diferida forma y lugar, acarreando mayor retraso y confusión en nuestro peregrinaje hacia nosotros mismos.
El término nosotros, se refiere al aspecto mas sublime, mas esencial y profundo de nuestro ser, sin tapujos, excusas, argumentos o desvíos....a esa parte de nosotros a la que no podemos engañar...a la que nos pone frente a los retos que en otro momento y lugar nosotros mismos hemos escogido.
Así pues, cualquier distracción en el camino nos retrasará de nuestra cita con nosotros mismos....

No conviene confundir distracción, que define algo que nos aleja, separa o despista de nuestro propósito, con aprendizaje profundo e integración, definiendo esto último, que si bien no hay que despistarse, tampoco conviene apresurarse sino hemos integrado del todo las etapas y eslabones de nuestra cadena de acontecimientos...Todos ellos necesarios y vitales, puesto que sino queremos perder el tiempo, bien vale la "alegria"  trabajar minuciosamente todos y cada uno de los matices, de todas y cada una de las fases que nos toque trabajar...Esto se reduce a la frase de "vísteme despacio que tengo prisa" o lo que es lo mismo, no te saltes ningún capítulo de ninguna lección, por pensar que estás "vuelto" de eso, puesto que podría significar una falsa modestia, o una arrogancia y prepotencia respecto a lo real de tu situación y momento de vida.
Flexibilidad, generosidad, amor, apertura, presencia, compasión, expansión, comprensión y determinación, tolerancia,no han de ser confundidas con Rigidez, exigencia, deseo, exclusión,  egoísmo, contracción, puesto que si bien las primeras tienen que ver con el alma, las segundas aluden a la personalidad...
Aunque aparezca cualquiera de la lista, lo importante es abrirse a la REFLEXION, la cual nos ayudará a discernir desde el corazón, lo que nuestra alma necesita y por lo que quiere seguir trabajando y desarollándose, que no luchando...La lucha, es para los que no han hecho las paces con sigo mismos, y les cuesta rendirse amablemente a la evidencia de lo que es.....Luchar siempre implica el riesgo de perder algo, y realmente lo tenemos todo, solo hemos de ver con los ojos del corazón, que son los que no juzgan, los que integran, los que aman, los que aceptan, los que se "rinden" al aprendizaje de la experiencia en lo divino...sabiendo seguro que cada vez esta actitud nos aproxima mas y sobre todo en mejores condiciones a  la puerta de salida de nuestro propio laberinto personal, pudiendo afrontar la siguiente etapa con la inteligencia, coraje, fuerza y lucidez del alma que nos haga dignos de seguir por la senda de la iluminación.