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martes, 30 de abril de 2013

Amar libremente...o querer esclavizado

La fuente del dolor y sufrimiento, tal y como nos enseñan en todas las tradiciones orientales es el apego. Nuestra sociedad nos empuja frenéticamente a desear, ya sea un coche, una casa, un viaje, un crecepelo o un perfume, que mas da.  Todo ello nos hace depender de lo externo, lo efímero, lo ilusorio al fin. Un maestro Zen decía a sus discípulos que vivimos en el mundo de la ilusión, y cuando falleció su hijo y lloraba desconsoladamente, los discípulos le preguntaron. -Maestro por que lloras, si dices que todo es ilusión?- a lo que respondió, un hijo es una ilusión muy grande.
Cuanto mayor es nuestra ilusión, mas apegados estamos a ella, y no nos permitirá ser libres y decidir. Uno de los mejores antídotos es ascender y crecer, desvincularse de la "mater" materia para alimentar el espíritu y   limitar en gran parte las supuestas necesidades del ego y el cuerpo.
Necesitamos comer y dormir- Que nos quieran y que nos acepten, va más allá de las carencias esenciales, tiene que ver con nuestras heridas, con nuestro pasado, con nuestra historia personal, a la que hay que honrar y comprender, trabajar en ella para desligarse de las cadenas de la repetición, y cortar amarras..para ser libres.
Tan doloroso es sufrir por perder algo, ya sea persona, animal, vegetal, mineral o cosa, que no tenerlo y desearlo, puesto que el ser no descansa por satisfacer un deseo, sino por la ausencia de este, como decía Antonio Blay.
El ser ama y se funde en la fragancia de una flor, en la melodía de una música, en la belleza de un atardecer, en la sonrisa de un niño, o en la caricia de tu amada, pero no lo necesita, solo lo disfruta y lo agradece por que es un regalo de la vida, y siempre está a tu disposición, sino pretendes atraparlo y poseerlo para ti, como  si no te sintieras completo sin ello. La buena noticia es que ya eres un ser completo, y no necesitas completarte solo sentir que lo eres.
Trabajemos para ese logro puesto que es el mejor regalo que nos podemos dar, nuestra libertad y disfrute de todas la cosas que nos brinda la vida, y es desde el presente y la aceptación a lo que nos sucede..Si sientes apegos y sufrimientos, obsérvalos, casi seguro que se moverán en tu tripa, respíralos y siente a que obedecen..al abandono, a sentirse rechazado, no aceptado...Haz subir tu energía, practica respiración consciente, meditación, que tu sexualidad sea sagrada y pura, porque solo así conseguirás trascender a la trampa del ego y de la esclavitud...La vida y mi pareja, son mis mejores maestras para el desapego, y puesto que a las dos las amo, trabajo en dejar caer lo que me esclaviza para ser libre...GRACIAS a TI AMOR y a la VIDA.

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